Moquillo Canino:
¿EN QUÉ CONSISTE EL MOQUILLO CANINO?
El moquillo canino es una enfermedad vírica que afecta a perros y hurones. Esta enfermedad provoca hasta un 50% de mortalidad aproximadamente de todos aquellos individuos a los que afecta.
Este virus se transmite por contacto oronasal (boca y nariz). O bién de forma directa con otros individuos infectados. También por contacto con heces, saliva, orina y otros restos que el animal elimine y que puedan estar infectados.
La enfermedad se replica en el tejido linfático del animal y llega a invadir todo el organismo en un breve periodo de tiempo.
¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS QUE PODEMOS OBSERVAR EN NUESTRO CACHORRO?
Las zonas del organismo a las que principalmente afecta este virus son:
Sistema linfático
el sistema respiratorio
Sistema digestivo
el sistema genitourinario
Sistema nervioso
Los síntomas que podemos encontrar y observar en nuestro animal son:
- Fiebre, pérdida de apetito y decaimiento.
- Podemos observar alteraciones respiratorias como: mocos (descarga nasal que va a ser líquida y transparente al principio y a medida que van pasando los días, empieza a volverse más densa y verdosa), pueden aparecer tos, estornudos y problemas respiratorios (aparecen ahogos).
- Se observa también conjuntivitis con lagañas muy pegajosas y densas que impiden a veces al animal abrir bien los ojos.
- También ocurren trastornos digestivos como diarreas, vómitos y mucho dolor abdominal, que se nota sobre todo, cuando palpamos el abdomen.
- Suele aparecer endurecimiento y cuarteamiento de las almohadillas plantares.
- En un estado severo y avanzado de la enfermedad, se observan alteraciones nerviosas como convulsiones, contracciones musculares involuntarias, encefalitis,…
¿CÓMO DIAGNOSTICAMOS Y TRATAMOS EL MOQUILLO?
En caso de encontrar a nuestra mascota con estos síntomas, debemos acudir inmediatamente a nuestra clínica veterinaria habitual, para que el veterinario pueda hacer un diagnóstico rápido, puesto que de ese diagnóstico precoz, va a depender mucho la recuperación de nuestro cachorro.
Lo primero que hay que descartar es que se trate de otras muchas enfermedades que pueden cursar en el perro o el hurón síntomas parecidos y para ello, el veterinario realizará al animal una serie de pruebas en la consulta e incluso de laboratorio que puedan llevarlo a un diagnóstico acertado (por ejemplo, se deben descartar enfermedades víricas, bacterianas o parasitarias como: tos de las perreras, parvovirosis, toxoplasmosis, erhlichiosis,… )
El tratamiento de esta enfermedad estará encaminado a elevar las defensas del animal para que pueda hacer frente al virus y reponer las pérdidas que haya sufrido en el transcurso de la enfermedad.
Se utilizarán antibióticos para combatir las posibles infecciones bacterianas secundarias (pueden aparecer cuando las defensas del animal están bajo mínimos y complican mucho la recuperación), suplementos vitamínicos y alimenticios, y tratamientos sintomáticos en función del sistema afectado (por ejemplo mucolíticos, colirios, antidiarreicos, antieméticos,…), incluso pueden llegar a necesitar sueroterapia para recuperarse.
NOTA: Sólo el veterinario será quien pueda pautar el tratamiento para el cachorro en función de su estado y de su gravedad. Es muy importante no medicar a los cachorros en casa cuando veamos estos síntomas, pues les podemos causar más daño aún.